El saludo profesional: la primera impresión es la que cuenta.
Bastan 5 segundos para juzgar a una persona, o al menos, para crearnos una imagen de ella.
De la misma manera que juzgamos a otros por la primera impresión que nos causan, también nosotros somos observados, y de esos primeros momentos depende muchas veces nuestra reputación como profesional.
Hay muchas tácticas para causar buena impresión durante el saludo, pero voy a destacar 5 que para mí son de las más importantes cuando se conoce a alguien por primera vez.
1. Un buen apretón de manos
Como mando intermedio tendrás que presentarte muchas veces a personas de distinto rango e importancia.
¿Cuál es tu sensación cuando al apretar la mano de otra persona ésta la deja débil y sin fuerza? ¿Incómodo, desconcertado, sorprendido? ¿Todas a la vez? Si no quieres que tu interlocutor se sienta así, saluda con un apretón decidido y firme. No se trata de presionar hasta que llegue a crujir, como el Alcalde de Cullera, que ha roto más de un dedo al saludar, sino que es suficiente con ejercer brevemente un poco de presión y luego soltar.
Un buen apretón de manos comporta seguridad y confianza, todo lo contrario de los que saludan con la mano blanda, que transmiten flaqueza y falta de decisión. Pero todavía hay algo peor que saludar con la mano floja y es chocar los dedos en lugar de las palmas. Afortunadamente hay poca gente que saluda así pero «haberlos haylos», como las meigas.
Y si nada de esto te convence, al menos hazlo para ser más longevo. Un estudio llevado a cabo por el British Medical Journal reveló que la tasa de mortalidad es de un 67% más elevada entre las personas de más edad que estrechan la mano con debilidad que aquellas que da un apretón de manos con más firmeza.
2. No invadas el espacio personal
Tocar el brazo o el hombro del otro a la vez que se saluda, está aceptado en relaciones de confianza, pero no cuando alguien se presenta por primera vez. Tampoco conviene agitar el brazo o moverlo de arriba a abajo compulsivamente durante el apretón de manos. Con un ligero movimiento es suficiente.
Para muestra. éste simpático video sobre lo que no hay que hacer al saludar.
3. Los objetos también hablan de ti
Si vas a acudir a una reunión o entrevista, cuida el aspecto de los objetos que vas a llevar contigo. El maletín, la cartera, el bloc de notas, los bolígrafos, las carpetas… todos esos elementos dicen mucho de ti y de tu crédito como profesional. Llévalos siempre en buen estado, y si son corporativos, mejor.
4. Establece contacto visual
Mira siempre a los ojos de la persona que te saluda. Procura no desviar la mirada, mirando al suelo o a otro lado, es un síntoma de inferioridad o timidez. El contacto visual es muy importante.
5. Quién saluda a quién
Existen unas reglas de quién debe ser el primero en ofrecer la mano. Lo normal es que la mujer se la ofrezca al hombre, a no ser que éste tenga una jerarquía o posición mayor, en cuyo caso lo habitual es que él ofrezca la mano primero. De la misma manera, la persona con mayor edad o categoría es el que debe tomar la iniciativa.
Y si además saludas sonriendo, mejor que mejor.
Una sonrisa no cuesta nada pero vale mucho.
¿Y tú, haces algo más para causar buena impresión?
Muy interesante aprendí muchas cosas de dejar un buen impresión gracias